Al finalizar nuestra adaptación en el depto que estábamos, fuimos al depto de César y Rossana, ahí nos recibieron con sushi y picadita lo cual fue muy bueno, pero el hambre que tenía era voraz como los leones de circo hacia los payasos y con eso no alcanzaba. 
Pero lo bueno estaba por llegar, de ahí salimos y nos fuimos al salón verde del yacht club a cenar y ahí si, después de que descodifique todos los nombres raros del menú, porque no había cosas simples, me pedí un plato que no recuerdo bien el nombre pero era pollo con salsa ciboulette con papas noisette, una delicatessem para el paladar, una explosión de sabores suaves y a la vez fuertes.
Volví con César a su casa, como había dicho tienen un depto y su casa, que ahora entendí por que, el depto a veces les ofrece mayor comodidades y tranquilidades que la casa, es normal.
Me levanté esta mañana y bueno, desayune alto desayuno, gracias a Ángela la mujer que limpia la casa de César, y bueno ahora haré algunos avisos publicitarios y veo si me tiro un rato a la pile, porque acá el calor esta fuerte jajajaj.
Le mando un abrazo a todos!
Sigan leyendo que desde mañana empezamos la subida a la montaña rusa y eso va a ser divertido ;)
Cuídense
Rafa!
Pd: ayer hice dos descubrimientos copados, uno que en Asunción es una hora menos que argentina, ósea que al cruzar la frontera, es casi como volver en el tiempo, y el otro descubrimiento fue el del limbo, si, el limbo, porque? Me sellaron el pasaporte de que salí de argentina, pero no me lo sellaron de que entre a Paraguay, asique por dos minutos más o menos, estuve en un limbo jajajaj
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